AUTOR: PR. RICARDO CLAURE P.
¡Gloria a Dios! Vivimos los últimos días. Ante nuestros ojos tenemos el acontecimiento
más impresionante de la historia del mundo: ¡Jesús está viniendo! Otra de las señales
que nos anuncian su Venida inminente fue predicado explícitamente por nuestro amado
Salvador: «Y será predicado este evangelio del reino por todo el mundo, para
testimonio a todas las naciones y entonces vendrá el fin» (Mat. 24: 14)
El mundo y sus moradores están preocupados por lo que ellos llaman «fenómeno
social». En toda América Latina y el mundo se está viendo predicar el evangelio -en
calles, parques y plazas- a grupos cristianos de todas las denominaciones. Esto los
desconcierta. Un periodista venezolano nos preguntaba en 1990, qué está ocurriendo.
El había viajado en los últimos tres meses en una gira por América Latina y había visto
en las plazas de Buenos Aires, Santiago, Montevideo, Asunción, Lima, Bogotá, Quito,
algunas ciudades del Brasil y en ese momento, en la Plaza San Francisco de esta
ciudad de La Paz, el mismo -como él llamaba- «movimiento cristiano»... gente
predicando a Jesucristo. No ocultaba su asombro y al mismo tiempo su preocupación.
Empezando con Mateo 24:14 le presentamos el Evangelio del Reino, testificándole que
es una señal de los últimos días y que ¡Jesús está viniendo!.
Esta es una preciosa realidad, el espíritu de los cristianos ha sido despertado por Dios
para que se predique su evangelio por todo el mundo. En los cinco continentes hoy se
está predicando su Palabra ¡Gloria a Dios! ¡El fin está cerca!. (REVISIÓN 8-OCT-2010).
PARA TESTIMONIO A LAS NACIONES
Las naciones se preguntan, como ya hemos visto, del fenómeno que está ocurriendo. El
evangelismo mundial preocupa a las naciones, las cuales en su incredulidad no aceptan por
ningún motivo la Palabra de Dios. Muchos que son ciudadanos de estas naciones rechazan a
Jesucristo como su Señor y Salvador. Se les predica de su segunda venida y se burlan,
cumpliéndose la Palabra que dice: «Ante todo, sabed esto: que en los últimos días
vendan burladores, con su sarcasmo, siguiendo sus propias pasiones, diciendo:
¿Dónde está la promesa de su venida? Porque desde que los padres durmieron, todo
continúa tal como estaba desde el principio de la creación. Pues cuando dicen esto,
ignoran intencionalmente este hecho, que los cielos existían desde hace mucho
tiempo, y también la tierra, surgida del agua y establecida entre las aguas por la
Palabra de Dios, por lo cual el mundo de entonces fue destruido, siendo inundado con
agua; pero los cielos y la tierra actuales están reservados por su palabra para el fuego,
guardados para el día del juicio y de la destrucción de los impíos» (II Pedro 3:3-7 Biblia
de las Américas). Todos están teniendo su oportunidad y algunos la están rechazando. En el
día del juicio no podrán decir que no sabían o que no se les predicó. El Evangelismo Mundial
de hoy les servirá de testimonio en sus naciones, ¡Gloria a Dios de los Cielos!.
(REVISIÓN 8-OCT-2010).
UN PUEBLO PARA SU NOMBRE
Hechos 15:14-16 nos dice: «Dios visitó por primera vez a los gentiles, para tomar de
ellos pueblo para su nombre... Después de esto volveré...» Desde el día de
Pentecostés hasta hoy en día el Espíritu de Dios se está derramando sobre toda carne
(Hech. 2:17), Dios que sigue visitando por primera vez, a través del evangelio, a todas
las naciones gentiles. Hemos visto ya su objetivo, «para testimonio a las naciones».
Pero hay otro: Recoger de en medio de las naciones gentiles un pueblo para su
nombre. ¡Sí! Hay muchas personas, a quienes se les predica el evangelio y no se
burlan de la segunda venida de Cristo, es más, se arrepienten de sus pecados y
aceptan a Jesucristo como su Señor y Salvador. Estos pasan a formar parte de un
pueblo para su nombre. Muchos confunden el hecho de evangelizar el mundo con el
de cristianizar el mundo. Para muchos, cristianizar el mundo significa que todos los
ciudadanos del planeta tendrán que ser cristianos a través de la predicación del
evangelio. Este es un error garrafal. Este aspecto no les compete a los creyentes de
hoy. Sólo Jesús cuando instaure su reino milenial será capaz de cristianizar a todo el
planeta en que todos le conocerán (Zac. 14:16; Is. 2:1-4). No debemos confundir
«evangelizar» con «cristianizar». Evangelizar a todas las naciones, no significa que
todos los ciudadanos de las naciones se conviertan al cristianismo, sino que en medio
de las naciones se recoja un pueblo para su nombre. Dios no nos ha llamado a
cristianizar Bolivia, sino para tomar «de en medio» de los bolivianos un pueblo para su
nombre. Un grupo de creyentes reunidos de entre los bolivianos por el Espíritu Santo,
un hombre aquí, otro allá; una mujer aquí, otra allá; un niño aquí, y una niña allá. De
este modo Dios está reuniendo de entre los bolivianos «un pueblo para su nombre».
Lo mismo está ocurriendo en cada país del mundo. (REVISIÓN 8-OCT-2010).
DESPUÉS DE ESTO VOLVERÉ
El Señor nos da su promesa en su Palabra: «...Entonces vendrá el fin». ¿Quién es el
fin? Jesús dijo: «Yo soy el alfa y la omega, principio y fin, el que es y que era y
que ha de venir, el Todopoderoso» (Apoc. 1:8). Jesús vendrá a recoger a los suyos.
A los que forman parte de ese pueblo para su nombre. El nos arrebatará (I Tes. 4:17).
Cuando se complete el número de ese pueblo para su nombre. Cuando se convierta el
último cristiano. El Señor promete: «Después de esto volveré». ¡Gloria a Dios! El
promete volver y salvarnos de la ira venidera (I Tes. 1:10).
(REVISIÓN 8-OCT-2010).
AUMENTO DE LA TECNOLOGÍA: ¡PARA PREDICAR LA PALABRA!
El profeta Daniel, en el siglo VI A.C. profetizó que en los últimos días «la ciencia se
aumentará» (Dan. 12:4). Hoy en día vivimos esta palabra profética. Los adelantos
científicos y la tecnología moderna los permiten ser informados al instante de cualquier
evento que sucede en el país y el mundo ¡esto en nuestros propios hogares! Así es la
misericordia de Dios. Hoy su Palabra llega a cada casa por amor. Primero fue la radio,
la televisión y ahora, la Internet, que incluye radio y TV, pero a nivel digital.
(REVISIÓN 8-OCT-2010).
LA ALDEA GLOBAL DE LOS ÚLTIMOS DÍAS PROFÉTICOS
Cuando uno vive en una aldea, es testigo ocular de cualquier noticia al instante, porque el
evento ocurrió a algunos metros del lugar donde uno se encuentra. Con el aumento de la
ciencia profetizado por Daniel ¡Ya no hay distancias!. Somos testigos oculares, todos los
días, de hechos ocurridos en cualquier parte del mundo, como si viviésemos en la misma
«aldea». Este es el concepto de «Aldea Global». ¡Y esto estaba profetizado en la Biblia!:
(1).- Cuando EEUU, Rusia y sus aliados (invasión de Gog) hayan invadido Israel (Ezequiel
38:1-15), Dios destruirá a Gog y sus ejércitos con terribles juicios (Ezequiel 38:17-22), lo que
verán las naciones con sus propios ojos (Ezequiel 38:16, 23; 39: 23). (2),- Cuando «la
bestia» asesine a los 2 testigos, sus cadáveres serán exhibidos en Jerusalén. «Y los de los
pueblos, tribus, lenguas y naciones verán sus cadáveres por tres días y medio, y no
permitirán que sean sepultados» (Apoc. 11:9) (3).- Cuando el Anticristo simule «su
resurrección», permitiendo la posesión de su cuerpo por la Bestia que sube del abismo, que
«sanará» su herida mortal en la cabeza, TODA LA TIERRA SE MARAVILLARÁ Y
ENLOQUECERÁ EN POS DE ÉL, al ser testigo de este evento (Apoc. 13:3).
(REVISIÓN 8-OCT-2010).
¡Vivimos días finales! arrepiéntete de tus pecados y acepta a Jesucristo como único Señor y
Salvador de tu alma. ¡Hazlo ahora, porque pronto será tarde!. (REVISIÓN 8-OCT-2010).
© Ricardo Claure P., 2010
